La periodista y actriz porno Alejandra Omaña, conocida como Amaranta Hank, habló con 'El Metalero' de Kienyke, quien le preguntó por personajes del entretenimiento, la política y la vida pública nacional.
A continuación, la frase de reacción frente al personaje propuesto.
Álvaro Uribe: "Confío en el karma".
Rodolfo Hernández: "¿Sigue vivo ese señor?"
Iván Duque: "No sabía el problema en el que se metía. Me da hasta pesar.
Francia Márquez: "Espero que este gobierno le de la oportunidad de hacer todo lo que quiere hacer".
Brigitte Baptiste: "Es una de las personas más inteligentes que he conocido en la vida. Cruzamos palabras y yo me quedo solo en silencio porque es demasiado brillante".
Esperanza Gómez: "Mamasita, divina, maravillosa. Me encanta".
Nacho Vidal: "Lo detesto. (Risas). El porno no siempre es real. El porno es actuación".
Miguel Polo Polo: Vergonzoso. Triste. Pero me estoy dando cuenta de que está usando un rimel muy bonito porque tiene pestañas lindas
Amaranta Hank: abolicionistas impiden mejorar condiciones de trabajadoras sexuales
Recientemente, Alejandra Omaña, más conocida como Amaranta Hank, estuvo en el Congreso de la República defendiendo los derechos de las trabajadoras sexuales. Contó con el respaldo de las parlamentarias Sandra Ramírez y María Fernanda Carrascal. La audiencia pública buscaba que a las trabajadoras sexuales se les garantizaran condiciones laborales más seguras, dignas y estables.
Ya en entrevista con 'El Metalero' de Kienyke la actriz había explicado algunos detalles de lo que es el trabajo sexual, dentro del que hay diferentes modalidades, dentro de las que se encuentran, por ejemplo, modelaje webcam, creación de contenido para plataformas de Internet, pornografía; trabajo sexual en calle, bares, discotecas, whiskerías y hasta carretera.
Astrasex es el sindicato en el que está Hank. Desde allí se busca "hablar desde nuestras distintas voces porque nuestro trabajo está en constante amenaza (...) porque no nos dejan hacer nada. Desde el Estado han faltado garantías; quieren tapar el son con un dedo. No existen riesgos profesionales para trabajadoras sexuales, por ejemplo. No hay espacios seguros. Hay un abuso policial que es latente. No han querido regular los espacios desde los que se ejerce el trabajo sexual en Colombia, entonces no hay condiciones sanitarias", señaló.