Para algunos colombianos es costumbre consumir bebidas embriagantes en la mayoría de las festividades, de ahí deriva que el Día de la Madre sea una de las épocas en las que haya un alto incremento de agresiones entre personas de la misma familia.
En estas festividades muchas personas suelen juntarse con varios miembros de su familia con los que no comparten a menudo o con quienes precisamente han tratado de evitar contacto por algún altercado de tiempo atrás, por lo que bajo el efecto del alcohol sacan todo lo que no dijeron tiempo atrás, llegando incluso a la violencia.
El psicólogo Julián Cohecha le comentó a Kienyke.com que estos hechos no se dan porque sea específicamente el día de la madre, sino por sentimientos reprimidos que tienen las personas desde la niñez hacia algún familiar, no necesariamente la madre o el padre, implicando que la reunión sea el momento perfecto para liberarlo.
"Hay muchos factores que influyen, el primero de ellos es el alcohol, el hecho de que la gente se toma permite que muchos conflictos internos que está viviendo o vivió el agresor sean desatados porque la persona se desinhibe. El individuo generalmente ejerce cierto control sobre las situaciones que está padeciendo y cuando bebe salen", explicó el especialista en psicología clínica.
El profesional expresó que los conflictos se dan por lo general en contextos familiares porque los traumas psicológicos de las personas tienden a buscar un culpable externo y lo relacionan con hechos que hayan sucedido en la infancia.
"En el desarrollo infantil los referentes afectivos son precisamente la mamá, el papá y la familia, por tanto todo lo que nosotros hacemos hoy en día como adultos viene siendo una eco de lo que fuimos cuando éramos pequeños, es decir que de niños vamos interiorizando la circunstancias, eventos o momentos que nos van formando, por eso cuando nosotros nos vemos enfrentados una situación interpersonal, empezamos a tomar como culpables los allegados", enfatizó Cohecha.
En medio de la cuarentena las autoridades han tomado medidas para evitar que en la conmemoración se produzcan hechos que lamentar como en años anteriores, por eso se ha decretado toque de queda y ley seca en diferentes departamentos y ciudades.
Esta acción para el experto es de gran utilidad en medio del encierro, ya que el distanciamiento social aumenta los niveles de ansiedad,angustia, inseguridad y estrés en las personas; y cuando esos sentimientos o esos aspectos psicológicos aumentan, también incrementa la irritabilidad frente algunos aspectos que de pronto antes no generaban es explosividad, disparando los casos de violencia intrafamiliar
"Con medidas como la ley seca puede que los casos de agresión o violencia en todas las familias podrían tender a disminuir en esta festividad, porque no estarían los agentes o los elementos que detonan los conflictos internos de la persona. Esto implicaría que la persona trate de resolver el conflicto de una manera más sana, bajo el diálogo tranquilo y no bajo el efecto el alcohol", puntualizó Julian Cohecha a este medio.