Este viernes 14 de junio, la activista colombiana Mariana Lozano Medina, dio un discurso ante los asistentes a uno de los foros en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el que centró su mensaje para defender y exigir los derechos de las personas con capacidades especiales.
Medina, fue panelista invitada representando a la organización Human Rights Watch, de la que es becada desde diciembre del año por la Marca Bristo, gracias a su destacada labor en liderazgo y defensa de los derechos de las personas con discapacidad.
“Tengo el privilegio de hablar frente a ustedes hoy, no solo como representante de la beca Bristol para América, sino también como una defensora de las personas con discapacidad”, comenzó su intervención frente a los asistentes.
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Además, recalcó la importancia de tener clara la diferenciación entre aquellas personas con condiciones especiales y las que se relacionan erróneamente como si se padeciera de alguna enfermedad.
“Déjenme aclarar que esta condición no es una enfermedad, somos personas dotadas con varias habilidades en las que somos capaces de tomar decisiones y contribuir positivamente a nuestras comunidades”, dijo.
Sin embargo, destacó que aún existen muchas barreras sociales que no permiten la libre expresión ni participación como agentes en diversos aspectos que puede requerir una comunidad.
“Nos encontramos, especialmente en las redes sociales, muchísimas barreras que limitan nuestra participación activa en la sociedad. Eso es muy frustrante”, añadió.
Pese a esto, y desde su propia experiencia, menciona que ha encontrado en la fe en Cristo, una fortaleza impresionante para salir adelante, además del inconfundible apoyo de sus padres.
“Cristo nutrió mi fuerza, y gracias a eso, hoy he completado con éxito mi educación. Hablo con fluidez inglés y castellano, he tenido un trabajo con el apoyo necesario para sobresalir y poder aprender continuamente”, expresó.
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Mariana pidió que se intensifiquen políticas y prácticas para que cada vez se tengan más en cuenta en entornos laborales las condiciones especiales de estas personas, destacando el ejemplo del gobierno iraquí.
“Hay prácticas ejemplares que la sociedad puede adaptar para garantizar entornos y trabajos accesibles para las personas con discapacidad. El gobierno de Irak, por ejemplo, tiene una legislación que exige cuotas de empleo en el sector público y privado”, mencionó.
Llamó la atención que expuso su propia experiencia, para demostrar que si todas las personas con condiciones especiales tuvieran garantías y oportunidades, como las que ha tenido, es posible ver el gran valor que estas personas pueden contribuir a la sociedad.
“Gracias a los programas en los que he participado y pertenecido, he podido hacer valer mis derechos, he obtenido una educación única, y una experiencia que me han integrado a la sociedad. Hoy puedo gestionar mis propias finanzas, vivir de forma independiente y tomar mis propias decisiones”. recalcó.
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Por último, envió un mensaje para que todas las personas con condiciones especiales sean apoyadas y valoradas, demostrando que también son valiosas en la construcción de sociedad.
“Nos merecemos grandes oportunidades, somos vidas autónomas para ser parte de la sociedad y poder hacer realidad nuestros sueños como cualquier ser humano. Hay que apoyar la esencia de estas personas, ya que estas discapacidades son pilares fundamentales para nuestras bases”, concluyó.
¿Quién es Mariana Lozano Medina?
Mariana Lozano es una joven con discapacidad intelectual, defensora de los derechos de los jóvenes con discapacidad en Colombia, en la que apoya a estas personas y a sus familias, siendo parte de la organización Cooperativa Multiactiva Mentes Diferentes – Coopmente.
Su objetivo es representar e impulsar a esta población, a promover su autonomía, derechos e inclusión en la sociedad.
Como parte de sus estudios ha venido incursionando sobre importantes mecanismos legales para proteger los derechos de las personas con discapacidad intelectual.
En diciembre de 2023, recibió la beca Marca Bristo de Human Rights Watch, gracias a su destacada labor.
Mariana ha superado el estigma y la exclusión, sabiendo desarrollar habilidades para la vida, con aprendizajes financieros y seguridad personal, que han sido fundamentales para su independencia y autonomía.
