Una iniciativa que busca ampliar la cobertura de salud para animales domésticos en Bogotá ha generado una gran controversia. Se trata del proyecto de acuerdo que estudia actualmente el Concejo de la capital y que busca establecer un servicio de urgencias para las mascotas de familias de estratos uno y dos.
Lea también, Diez cosas que no sabía del mejor amigo del hombre.
El proyecto, de autoría de los concejales Clara Lucía Sandoval y Antonio Sanguino, contempla que la Secretaría de Ambiente lidere el programa para garantizarles a perros y gatos de familias pobres una atención médica a bajo costo o gratuita, debido a lo caro de estos procedimientos.
También lea, El descaro de los paseadores de perros.
El proyecto expone que por estos altos costos, “en muchas ocasiones los dueños de estos animales desisten de hacerle un procedimiento adecuado y así puedan salvar su vida o brindarle una calidad de vida digna al animal, llevando al abandono del mismo e incrementando la proliferación de vectores y de condiciones higiénico sanitaritas contraproducentes para los ciudadanos”.
Kienyke.com se comunicó con funcionarios de la Secretaría de Ambiente, quienes aseguraron que no son competentes para brindar cobertura de salud a las mascotas, pues aunque hay un decreto del 2013 que así lo establece, hasta que no se construya la Casa Ecológica de los Animales, en la que se prestará servicios de urgencias para las mascotas, esa Secretaría no se hará cargo del tema.
De otro lado, la Secretaría de Salud, que actualmente sería la competente para hacerse cargo de esta propuesta, presentó concepto desfavorable al proyecto de acuerdo, al que calificó de "inviable".
En primera medida esta entidad enfatizó que ninguna Secretaría Distrital de Salud es competente para prestar servicios de salud veterinaria. De igual manera, el concepto argumenta que llevar a la práctica este proyecto desincentivaría el buen cuidado de las mascotas por parte de las familias de estratos bajos.
“Proveer gratuitamente los servicios propuestos sería antagónico con la promulgación en una sociedad de temas como educación humanitaria y adquisición y tenencia responsable de animales de compañía, pues esto generaría un efecto adverso en la medida que los propietarios o tenedores de estos animales no sentirían responsabilidad antes de adquirirlos”, dice el concepto.
De igual manera, la Secretaría de Salud expuso los inconvenientes de dejar gratuitos los servicios de emergencias veterinarias. “No conviene que los usuarios no se hagan cargo de los costos que la atención veterinaria conlleve, dado que en muchos casos las situaciones que potencialmente generan una urgencia, son justamente situaciones que los propietarios de los animales no contemplaron al no aplicar principios de tenencia responsable como llevarlos sin correa, bozal, o dejarlos deambular libremente”, expuso la Secretaría.
“Esto – continúa el concepto – sería contraproducente pues no se generaría sentido de pertenencia, de esfuerzo y responsabilidad para tener un animal, aspecto clave de quienes decidan convivir o llevar a casa animales de compañía”.
Finalmente la Secretaría de Salud expone que antes de que una persona adquiera una mascota debe hacerse los siguientes interrogantes: “¿Tengo el tiempo para dedicarle, cuento con el espacio requerido según la especie y raza, y cuento con los recursos para proveerle los cuidados que demanda, entre los que destaca la urgencia de un médico veterinario?”.
Sin embargo, una cosa es lo que expone el Distrito sobre el proyecto y otra es saber cómo llevarlo a la práctica. Este medio consultó con algunos expertos en el tema, quienes indicaron que lo procedente es que la alcaldía realice convenios con clínicas veterinarias privadas para que presten el servicio a las mascotas de familias de estratos uno y dos.
Kienyke.com habló con gerentes de algunas clínicas veterinarias en la capital para saber su opinión del proyecto. John Bustos, de la Clínica Veterinaria Animales Felices, manifestó que no sería viable que centros veterinarios privados puedan ofrecer servicios de cirugías o tratamientos para mascotas de propietarios de escasos recursos.
“Hay que cubrir los costos del arriendo, insumos, materiales, equipos, no es viable desde el punto de vista empresarial que busca una rentabilidad y utilidad esta medida”, explicó.
Sin embargo, dio como salida al problema el crear un programa de prevención de enfermedades de perros y gatos. “Estamos trabajando en la medicina preventiva, para minimizar los costos a los propietarios para tratar enfermedades que se pueden detectar tempranamente, en temas puntuales como nutrición”, explicó.
Bustos también expuso que -en dado caso- el Distrito debería subsidiar el tratamiento y atención de urgencias veterinarias en las clínicas privadas para propietarios de los estratos más bajos, teniendo en cuenta que servicios básicos como la esterilización tiene un costo de 200 mil pesos, que no pueden ser costeados por las familias de escasos recursos.
El representante legal de la clínica Animales Felices también indicó que para poder llegar a barrios populares, personas que se hacen pasar como veterinarios, y sin tener estudios y a veces conocimientos exactos del tema, realizan toda clase de procedimientos para mascotas a bajos costos, lo que muchas veces pone en peligro la vida misma del animal.
El debate apenas se abre para este proyecto, el cual deberá ser aprobado en comisión y plenaria del Concejo de Bogotá.
Kienyke.com se comunicó con funcionarios de la Secretaría de Ambiente, quienes aseguraron que no son competentes para brindar cobertura de salud a las mascotas, pues aunque hay un decreto del 2013 que así lo establece, hasta que no se construya la Casa Ecológica de los Animales, en la que se prestará servicios de urgencias para las mascotas, esa Secretaría no se hará cargo del tema.
De otro lado, la Secretaría de Salud, que actualmente sería la competente para hacerse cargo de esta propuesta, presentó concepto desfavorable al proyecto de acuerdo, al que calificó de "inviable".
En primera medida esta entidad enfatizó que ninguna Secretaría Distrital de Salud es competente para prestar servicios de salud veterinaria. De igual manera, el concepto argumenta que llevar a la práctica este proyecto desincentivaría el buen cuidado de las mascotas por parte de las familias de estratos bajos.
“Proveer gratuitamente los servicios propuestos sería antagónico con la promulgación en una sociedad de temas como educación humanitaria y adquisición y tenencia responsable de animales de compañía, pues esto generaría un efecto adverso en la medida que los propietarios o tenedores de estos animales no sentirían responsabilidad antes de adquirirlos”, dice el concepto.
De igual manera, la Secretaría de Salud expuso los inconvenientes de dejar gratuitos los servicios de emergencias veterinarias. “No conviene que los usuarios no se hagan cargo de los costos que la atención veterinaria conlleve, dado que en muchos casos las situaciones que potencialmente generan una urgencia, son justamente situaciones que los propietarios de los animales no contemplaron al no aplicar principios de tenencia responsable como llevarlos sin correa, bozal, o dejarlos deambular libremente”, expuso la Secretaría.
“Esto – continúa el concepto – sería contraproducente pues no se generaría sentido de pertenencia, de esfuerzo y responsabilidad para tener un animal, aspecto clave de quienes decidan convivir o llevar a casa animales de compañía”.
Finalmente la Secretaría de Salud expone que antes de que una persona adquiera una mascota debe hacerse los siguientes interrogantes: “¿Tengo el tiempo para dedicarle, cuento con el espacio requerido según la especie y raza, y cuento con los recursos para proveerle los cuidados que demanda, entre los que destaca la urgencia de un médico veterinario?”.
Sin embargo, una cosa es lo que expone el Distrito sobre el proyecto y otra es saber cómo llevarlo a la práctica. Este medio consultó con algunos expertos en el tema, quienes indicaron que lo procedente es que la alcaldía realice convenios con clínicas veterinarias privadas para que presten el servicio a las mascotas de familias de estratos uno y dos.
Kienyke.com habló con gerentes de algunas clínicas veterinarias en la capital para saber su opinión del proyecto. John Bustos, de la Clínica Veterinaria Animales Felices, manifestó que no sería viable que centros veterinarios privados puedan ofrecer servicios de cirugías o tratamientos para mascotas de propietarios de escasos recursos.
“Hay que cubrir los costos del arriendo, insumos, materiales, equipos, no es viable desde el punto de vista empresarial que busca una rentabilidad y utilidad esta medida”, explicó.
Sin embargo, dio como salida al problema el crear un programa de prevención de enfermedades de perros y gatos. “Estamos trabajando en la medicina preventiva, para minimizar los costos a los propietarios para tratar enfermedades que se pueden detectar tempranamente, en temas puntuales como nutrición”, explicó.
Bustos también expuso que -en dado caso- el Distrito debería subsidiar el tratamiento y atención de urgencias veterinarias en las clínicas privadas para propietarios de los estratos más bajos, teniendo en cuenta que servicios básicos como la esterilización tiene un costo de 200 mil pesos, que no pueden ser costeados por las familias de escasos recursos.
El representante legal de la clínica Animales Felices también indicó que para poder llegar a barrios populares, personas que se hacen pasar como veterinarios, y sin tener estudios y a veces conocimientos exactos del tema, realizan toda clase de procedimientos para mascotas a bajos costos, lo que muchas veces pone en peligro la vida misma del animal.
El debate apenas se abre para este proyecto, el cual deberá ser aprobado en comisión y plenaria del Concejo de Bogotá.
