El procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez, se sumó a la solicitud del Fiscal General, Néstor Humberto Martínez, de convocar con urgencia el Consejo Nacional de Estupefacientes para revisar la decisión del Gobierno Nacional de suspender la aspersión de cultivos de coca en mayo de 2015.
Según el Procurador, la política de erradicación manual no ha sido exitosa. "El país está nadando en coca y ahora vamos a naufragar en coca, ya que el Gobierno renunció a perseguir este delito y permitió el fortalecimiento del narcotráfico en aras de complacer las demandas de las Farc”, señaló.
Al respecto, el ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, aseguró a KienyKe.com que el panorama es totalmente diferente, pues el Gobierno ha venido trabajando en un programa que incluye en las comunidades y en el trabajo de disminución de hectáreas de cultivo de coca que no incluyan plaguicidas.
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“El aumento de los cultivos ilícitos de coca en el país se concentra en cuatro o cinco departamentos. En el Putumayo, levantamos un paro que llevaba 39 días y el Gobierno ya tiene un acuerdo de aplicar un programa intensivo de erradicación, que sea voluntario, de mayor presencia estatal y muy integral”, dijo el funcionario.
De acuerdo con Murillo, esta problemática se está presentando en Nariño, Norte de Santander, Cauca y Caquetá. “En el resto de departamentos ha disminuido. Incluso, en Colombia ya tenemos departamentos con cero coca”, indicó.
Agregó que en lugar de pensar nuevamente en la fumigación, la población merece otro tipo de soluciones. “Yo creo que en un momento de acuerdos de paz, de construcción de nuevo país, no tiene sentido que prácticamente la única conexión con comunidades aisladas sea tirándoles herbicidas desde el aire”.
Ni Glifosato ni Glufosinato de amonio para erradicar coca.
Otro de los puntos que tocó el Procurador General se relaciona con la urgencia de tomar medidas para detener el crecimiento exagerado de las hectáreas de cultivo. "El ritmo de crecimiento indica que a 31 de diciembre del año pasado el país pudo haber llegado a 200.000 hectáreas cultivadas de coca", expuso Ordoñez.
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Al respecto, el ministro de Ambiente reiteró que no es posible pensar en que Colombia vuelva nuevamente a la aspersión aérea ni con glifosato ni glufosinato de amonio. “Vemos con preocupación que los herbicidas actúan con el mismo principio (…) ésta es una acción no controlada donde se aplica herbicidas de manera indiscriminada y esto afecta sustancialmente la biodiversidad en esas zonas que son patrimonio del país y de la humanidad”.
Luis Gilberto Murillo explicó que cualquiera de las dos opciones resultan ser perjudiciales a largo plazo. “El herbicida aumenta algún tipo de sustancia química en la planta, lo que evita que haga la fotosíntesis y la mata. Es un veneno realmente y aplicar este tipo de sustancias químicas debe hacerse en ambientes controlados y la aspersión aérea no generan esos ambientes controlados”.
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El jefe de la cartera citó como ejemplo lo que está sucediendo en Vietnam, que del año 65 al año 71 se aplicó el herbicida conocido como ‘agente naranja’ que causó un impacto negativo que ha durado hasta ahora. “Hoy, después de tantos años, están haciendo un proceso de descontaminación de los suelos por la fumigación aérea indiscriminada que se hizo allá. No queremos estar en 20 o 30 años como ese país, en un proceso de descontaminación de los suelos”, aclaró que en Vietnam se fumigó solo por espacio de seis o siete años y en Colombia llevamos 16 años fumigando con esta modalidad.
