El sector de ciencia, tecnología e innovación - CTeI ha sido históricamente considerado como uno de los menos relevantes para el desarrollo del país. Las cifras lo demuestran: mientras que en el 2019 el presupuesto nacional los sectores de defensa y minas cuentan respectivamente con recursos de $14 billones y de 2 billones de pesos, el Ministerio de Hacienda le asignó para el mismo periodo, $230 mil millones al sector de CTeI.
A pesar de lo anterior, el compromiso de los investigadores colombianos no permite que la limitación de recursos financieros por falta de visión de los políticos nuble su capacidad de proyectar a Colombia con base en el conocimiento.
Muestra de ese compromiso se pudo ver el fin de semana pasado, en el que de forma voluntaria nos reunimos más de veinte investigadores o gestores de ciencia en Villa de Leyva, para debatir sobre el rol de la Red la Gobernanza de Ciencia y su impacto en el sector.
En las bellas instalaciones del Instituto Von Humboldt, entre los cuadros y las imágenes de pájaros colgados en el techo, fuimos desarrollando una agenda concreta y estratégica para definir mejor lo que es la Red de Gobernanza de Ciencia, Tecnología e Innovación. Después de discusiones y risas, logramos definir la Red como un “colectivo cohesionado, dinámico y pluralista que contribuye al debate argumentado sobre la gobernanza y la gestión del conocimiento, la ciencia, la tecnología y la innovación”, cuya misión es la de promover acciones efectivas que mejoren la gobernanza y la gestión del conocimiento, la ciencia, la tecnología y la innovación para el desarrollo sostenible e inclusivo.
Sin recursos financieros, sin estructura formal, con un grupo de Whatsapp como nuestra principal herramienta de comunicación y con el compromiso intransable de los miembros de la Red, logramos generar un diálogo constructivo para proyectar el sector. Empezamos por conocernos entre nosotros, pues aunque todos hacemos parte del sector, muchos no habíamos tenido el placer de compartir con el otro; luego establecimos temas prioritarios y finalmente, logramos entablar un diálogo a partir de escuchar, respetar y concertar.
Uno de los grandes aciertos de estar reunión, fue superar la toma de decisión por mayoría, en donde las posiciones individuales perdían fuerza. En Villa de Leyva decidimos que a partir de ese momento, cuando necesitáramos llegar a acuerdos, se harían por medio de una votación individual con la voz de los presentes. Esto permitiría que al votar, la voz de cada miembro de la Red, pudiera ser oída para expresar su acuerdo o preocupación sobre algún punto de lo sometido a escrutinio. En caso de necesitar alguna precisión, el resto de los miembros de la Red estaría dispuesto a explicar, con argumentos, las razones, o modificar lo sometido a sufragio.
Este aporte a la toma de decisiones resulta un elemento fundamental para generar confianza entre los miembros de la Red, quienes sintiéndose parte de un colectivo, mantienen la individualidad de su voz. Este mecanismo de toma de decisión, puede ir construyendo una capacidad colectiva para que el sector de CTeI, se vaya proyectando como un motor de desarrollo en Colombia a pesar de los pocos recursos que los políticos asignan para su presupuesto.
Desde ACAC seguiremos apoyando el fortalecimiento de esta Red con los recursos que hemos construido en estos casi 50 años de existencia.
María Piedad Villaveces
Directora Asociación Colombiana para el Avance de la Ciencia ACAC
@mapi_villaveces
