Vestida con un saco de paño cubierto por el chaleco antibalas, Laura Moreno se puso de pie, inclinó su cuerpo ante el micrófono y le respondió al fiscal Antonio Luis González: “Soy inocente de todo cuanto se me acusa”. Fueron las últimas palabras que dijo en el inicio de su juicio, el 22 de mayo, antes de salir esposada bajo la custodia de una agente del Inpec.
Laura Moreno, pues, ha explicado en todas sus declaraciones que no tuvo nada que ver con la muerte de Luis Colmenares. Sin embargo, la Fiscalía tiene varios elementos, hasta ahora inéditos, que serán expuestos en desarrollo del juicio. Uno es la contradicción en los relatos de Laura, especialmente cuando se le ha preguntado acerca de las horas en las que ocurrieron los hechos donde terminó muerto Colmenares.
La noche en que Luis murió, Laura hizo varias llamadas desde el celular de él.
Los investigadores han advertido inconsistencias en las cuatro declaraciones de Laura entregadas al CTI entre el 31 de octubre de 2010 y el 1 de agosto de 2011. En la primera aseguró que habían salido de la discoteca, donde varios estudiantes disfrutaron de una fiesta de disfraces, hacia las 3:15 de la madrugada de ese domingo y que minutos más tarde Colmenares se lanzó al caño.
En otra declaración afirmó que salieron de la discoteca a las 2:40 a.m., y después de estar “uno o dos minutos en la calle 85 con carrera 15”, Colmenares salió corriendo y acabó en el caño.
Aunque las imprecisiones de Laura pueden ser un simple asunto de olvido, hay un hecho mucho más contundente que no ha sido aclarado. En una de las declaraciones a la Fiscalía, la estudiante dijo que su celular estaba dentro del carro y no se explicaba en qué momento el teléfono de Colmenares acabó en sus manos. Dijo categóricamente: “Mi celular personal permaneció siempre en el carro”. Se trata del mismo vehículo en el que ella, Luis y varios amigos llegaron a la fiesta.
Entonces surge una pregunta: ¿por qué aparece una llamada de ella al celular del estudiante desparecido a las 4:11 de la madrugada, cuando se supone que para entonces Colmenares ya había caído al caño?
Desde el celular de Laura se registró una llamada al teléfono de Luis 45 minutos después de la muerte del estudiante.
Así quedó registrado en la sábana de registro del número 3114638XXX* de Comcel a nombre de Montajes J.M S.A., firma de servicios petroleros de propiedad Jorge Moreno, papá de Laura, y que ella usaba como su teléfono personal. Según el reporte conocido por KIEN&KE, la llamada duró 25 segundos. La comunicación también quedó registrada en el teléfono de Luis, que Laura devolvió a sus familiares al día siguiente del episodio.
Otro hecho que causa curiosidad es que, según la declaración de Laura, a las 4:00 de la mañana ya habían llegado los miembros del Cuerpo de Bomberos para comenzar la búsqueda de Colmenares, lo que supone que esa llamada no tenía sentido, pues a esa hora Laura tenía el teléfono en sus manos. Es decir, habría contestado ella misma.
¿Habló Laura con un muerto? Si ya habían pasado 45 minutos desde cuando supuestamente Colmenares cayó al caño, ¿qué razón tenía Laura para llamarse a sí misma? Estas preguntas aún no tienen respuestas, y solo se conocerán en el juicio, cuyo desenlace espera con ansias todo el país.
*número incompleto por confidencialidad
Una misteriosa llamada en el caso Colmenares
Mié, 30/05/2012 - 15:00
Vestida con un saco de paño cubierto por el chaleco antibalas, Laura Moreno se puso de pie, inclinó su cuerpo ante el micrófono y le respondió al fiscal Antonio Luis González: “Soy inocente de